8 de septiembre de 1966. La cadena de televisión americana NBC emite The Man Trap (La Trampa Humana), el primer capítulo de una nueva serie de televisión, Star Trek. Comenzaba así una de las sagas de ciencia-ficción más reconocidas de la historia. Un universo de ficción que se expande a lo largo de múltiples series de televisión, películas, novelas, videojuegos y cómics. Un icono de la cultura pop que este año 2016 celebra su 50 aniversario.
Octubre de 1967. Un mes después del comienzo de la segunda temporada, con la emisión del capítulo titulado Amok Time (La Época de Amok), la editorial Western Publishing, bajo el sello editorial Gold Key, pone a la venta el nº 1 de la serie de cómics Star Trek.
The Planet of No Return es el título de esta primera historia en viñetas, con guión de Dick Wood y dibujos de Nevio Zeccara. A día de hoy, acostumbrados al ferreo control que los propietarios de este tipo de franquicias ejercen sobre los productos derivados, lo que más llama la atención al fan trekkie son las incoherencias con ciertos elementos canónicos de la saga. Sirva como ejemplo el incumplimiento en este primer cómic de la Prime Directive (Directiva Principal), la directiva de no interferencia en el devenir de culturas extraterrestres, que el capitán y la tripulación están obligados a respetar. Y, además, valga como agravante que este interesante concepto ético apareció en la serie de TV en el episodio The Return of the Archons (El retorno de los Arcontes), emitido en febrero de 1967. El guionista, probablemente, no había visto ese episodio.
Pero si dejamos estos "detalles" al margen, algo que los fans más ortodoxos de Star Trek quizá no estén dispuestos a perdonar, estamos ante un cómic de ciencia-ficción trepidante, divertido, y que sin duda serviría de entretenimiento a la creciente comunidad de fans de la serie televisiva que ya por aquella época empezaban a ser legión en EEUU.
Comenzaba así, con este primer cómic, una larga y próspera vida de aventuras espaciales en papel. 49 años de entretenimiento en viñetas. Y seguiremos sumando años, todo recto hacia el mañana.